Conocer las características del punto de venta y sus puntos estratégicos es muy importante para encontrar los rincones que ofrecen más visibilidad y más oportunidades de venta.
El espacio útil de cualquier tienda se divide en zonas frías y zonas calientes. Distinguir la diferencia entre ellas nos servirá para saber dónde ubicar todos nuestros productos.
Zonas frías y zonas calientes
El 70% de los consumidores que entran en una tienda suelen recorrer solo las zonas calientes por eso, es tan importante la distribución de los productos según su probabilidad de ser vistos y comprados.
Las zonas calientes de un establecimiento son las zonas más visitadas por los clientes de forma orgánica ya sea una zona de paso o de interés para ellos.
Estas zonas suelen estar en la entrada de la tienda, en el cruce de pasillos o en la zona de cajas y son las más adecuadas para situar productos de compra impulsiva y nuevos lanzamientos. Todos los productos que coloques en esas zonas tendrán más salida y aumentarán su posibilidad de ser comprados.
También se pueden crear zonas calientes con estrategias de marketing basadas en implementaciones especiales como islas y cabeceras o colocando carteles impresos llamativos y vinilo adhesivo. Crear zonas de ofertas o decorar el espacio con una temática especial ayudará también a aumentar las visitas.
Las zonas frías son espacios con menos tráfico y suelen ser dónde las ventas son inferiores al resto. Normalmente, esto es debido a que son espacios mal iluminados o mal ubicados. En este tipo de zonas se suelen colocar productos de primera necesidad o más básicos, ya que son productos de alta demanda y no requieren grandes esfuerzos para ser vendidos.
Convertir zonas frías a zonas calientes
El principal objetivo es incrementar las zonas calientes y reducir las zonas frías. Si se detectan muchas zonas frías en un establecimiento, se pueden convertir en calientes mediante acciones y estrategias de trade marketing como:
- Mejorar la iluminación a través de espejos que reflejen de forma correcta la luz.
- Eliminar obstáculos arquitectónicos como las esquinas.
- Colocar productos básicos y de alta rotación.
- Si se trata de un supermercado, puedes colocar puntos de degustación para atraer a los consumidores.
- Decorar el espacio con productos impresos que generen y despierten el interés como los carteles de forex impreso o el roll up publicitario.
Si quieres saber más sobre los puntos de venta, no te puedes perder esta entrada del blog sobre la importancia de la publicidad en cualquier tienda.